¡QUÉ
ASCO DE VERANO!
(sobre todo en Madrid)
Sé que a casi
nadie le pasa como a mí; que la llegada del verano, o mejor diré la retirada de
los días fríos, encanta al personal..;esa cervecita con aceitunas y patatas
bravas, ese bañito en la playa de agua transparente (de momento), y bastante
fría ( pero qué importa), ropas ligeras y escotes rojo bermellón... Adiós a
resfriados ( aunque no siempre), las flores, los pajaritos…¡¡¡hummmm!!!
Pero.. señoras
y señores..,así como el invierno no es la chimenea frente al ventanal por donde
se ve caer la nieva…lo de la cervecita y las patatas.., tampoco es el verano.
Hace unos años
se puso de moda una cancioncita cuyo estribillo decía algo de la”maldita
primavera”.Pues yo te haría una canción a ti, maldito verano, en el supuesto de
que supiera componer canciones. Como no es el caso, te dedico estas letras.
Apenas se está yendo el frío, y para que nos
vayamos preparando, mandas por delante a
tu suave embajadora de pájaros cantores y polínicas florecitas: la primavera
maldita de la canción que, a los pocos días, abarrota las urgencias de
alérgicas víctimas con ojos lagrimosos y chorreantes estornudos en el mejor de
los casos, y de asmáticos con toda suerte de “ventolines” en los casos más
serios.
Cuando, tras varios intentos ( ahora frío, ahora calor, ahora
parece pero no, ahora sí… ) abro la
ventana para empezar el nuevo día, compruebo que, pese a la temprana hora, no
corre el más mínimo soplo de aire.
¡Y es que ya
has llegado, inevitable verano… has llegado!
¡Y te odio!
Sin retrasarlo
más, guardo mi querido y amoroso edredón en su funda , recojo la ropa de lana
que aun no he guardado ”por si acaso”,lleno de bolas matapolillas los bolsillos
de abrigos,chaquetas y pantalones, y cuelgo en los armarios unas perchitas apestosas,
cuyo envoltorio dice que huelen a lavanda pero es mentira, y que además no
siempre evitan que las maripositas te den un disgusto al recuperar la ropa
de invierno.
Por otra parte,no acaba
aqui tu antipática maniobra, verano, porque a las alergias y polillas sigue el
capítulo hormigas, tijeretas, cucarachas y, cómo no, mosquitos y moscas que
amargan reuniones y siestas hasta bien entrado el mes de septiembre. Inutil
echar “flus-flus, poner comida envenenada por los rincones y limones
atravesados con especias, que no hay nada que hacer…Hay que convivir con la
desagradable fauna porque…
¡Es verano,
criaturas mías!
¡¡¡ Y llegan las
vacaciones!!!Bueno, para aquellos que pueden permitírselas, que son cada vez
menos .
El carnicero
se ha marchado a sus posesiones de la montaña, la frutería y pescadería también cerradas.., de “los chinos”no me fío, El
Corte Ingles me pilla lejos…finalmente”,el indio” me salva parte del
abastecimiento(menos mal)
Tampoco tengo
con quien ir al cine ( penoso en los
meses estivales) porque mis amistades están fuera. Las más afortunadas
trabajando y la inmensa mayoría…pues donde pueden pero, en cualquier caso,
lejos de mi ciudad.
Otra de tus
lindezas ( odiada estación), son las noches de algarabía de jóvenes y no tanto,
que ríen y beben debajo de mis ventanas …o sea; si abro entra el airecito, a
veces, pero acompañado de risas y gritos con lo que, pese a ponerme tapones, no
me permiten conciliar el sueño. Si cierro, bañada en sudor, me paso la noche de
un lado a otro de la cama para sentir por unos instantes el frescor de la sábana.
Queda el recurso del aire acondicionado, pero rara vez lo pongo ya que me
destroza la nariz y la garganta, y no sé qué es peor.
Harta de todo
esto, cojo la maleta y me voy…a algún sitio; a una cama que no es la mía, con
una almohada que me destroza las
cervicales. A componérmelas en un baño que mi intestino no termina de aceptar,
con una ducha que…
¡Vamos, que
no!
Y
pacientemente voy contando las semanas que quedan para que todo vuelva a la
normalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario